Sobre una luna plátano. Diminuta en el cielo azul y rojo de un atardecer cualquiera. Sobre ella te ví meciéndote con el viento fresco. Ahí tus piernas blancas tocaban el suelo y tus cabellos de miel, tan finos como hilos de seda, se desparramaban cubriendo el horizonte en el límite con el mar.
Así te soñé una noche hace 10 años atrás. Así te empecé a amar. Y construimos una familia hermosa y nos hicimos más grandes (como creyéndonos adultos).
Cómo me gustaría tener una cuerda gigantesca que cruzara la luna plátano. Para que pudiéramos columpiarnos los 4 juntos: tú, mi flaca loca; el Pasqui, con sus guantes de arquero y su balón de fútbol; la Flo, el pequeño terremotito que nos cayó del paraíso; y yo. Y balancernos tan alto y tan fuerte que después pudiéramos arrojarnos con el vuelo y caer en la mejor de las playas. En el verano que siempre hemos querido disfrutar.
3 comentarios:
hermoso... simplemente HERMOSO. Un abrazo,
Polaf.
no, nunca he escuchado la canción. Quizás algún día la baje.
Lindo lo que escribiste; sería ideal el poder cumplir todos los sueños que uno quiere o volver a los momentos más felices...
Muy tierno, my friend!
Saluditos!
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